En una emotiva ceremonia cargada de nostalgia y significado histórico, la emblemática fundición Ventanas en Chile apagó sus hornos después de casi seis décadas de operación ininterrumpida. Durante todo este tiempo, la fundición desempeñó un papel fundamental en la transformación de los concentrados minerales de pequeños y medianos mineros, así como de algunas divisiones de Codelco, en valiosos ánodos de cobre.
La ceremonia, que contó con la destacada participación del presidente ejecutivo de la empresa, André Sougarret, sirvió como un momento para recordar los inicios de las instalaciones en la década de 1960, cuando se convirtieron en un símbolo de la industrialización y progreso en la Región de Valparaíso.
El evento congregó a diversas personalidades, entre ellas el presidente del directorio de Ventanas, Máximo Pacheco; el gerente general de la División Ventanas, Ricardo Weishaupt; la presidenta del Sindicato N° 1, Andrea Cruces; y el vicepresidente del sindicato de Turnados, Juan Peña. Además, se contó con la presencia de las ministras de Minería, Marcela Hernando, y de Medio Ambiente, Maisa Rojas, así como otras autoridades regionales y locales.
Durante las intervenciones, se rememoró con nostalgia la historia de la planta, erigida en la década de los 60, y se destacó la emblemática chimenea de colores blanco y rojo, la cual se convirtió en un símbolo de progreso y fue incluso incorporada con orgullo en el logo de la Municipalidad de Puchuncaví. Ricardo Weishaupt, gerente general de la División Ventanas, hizo hincapié en que la empresa no solo generó empleos de calidad, sino que también contribuyó al desarrollo de la comunidad, proporcionando viviendas y transformando de manera significativa la economía regional.
Es importante resaltar que en 2005, tanto la fundición como la refinería pasaron de manos de Enami a Codelco, debido a las considerables inversiones requeridas para cumplir con las nuevas regulaciones medioambientales. A pesar de las cuantiosas inversiones realizadas por Codelco en infraestructura y nuevas tecnologías, los problemas relacionados con la ventilación de la bahía generaron episodios medioambientales que afectaron a todas las empresas de la zona, siendo motivo de cuestionamiento.
Máximo Pacheco, presidente del directorio de Codelco, destacó la serenidad demostrada por los trabajadores a lo largo de este proceso y resaltó su invaluable contribución al trabajo realizado y al cierre de este ciclo histórico, que da paso a una nueva etapa relevante tanto para Codelco como para el país.
Los representantes sindicales también expresaron su orgullo por la división y agradecieron a la administración de Codelco por haber firmado el proyecto de modernización de la refinería. En este sentido, se destacó la importancia de trabajar en conjunto para revitalizar esta planta y continuar aportando al crecimiento y la prosperidad del país.
A partir de este momento, la refinería electrolítica de la División Ventanas se consolida como la principal planta, con una capacidad de producción anual de 420 mil toneladas de cátodos de cobre de alta pureza. Estos productos serán exportados a diversas partes del mundo, desempeñando un papel clave en la transición energética, la electromovilidad y la electrificación, llegando a lugares tan distantes como China, India y el Sudeste Asiático.