El 15 de abril del 2021 el sindicato recibió un doloroso llamado: confirmaban la muerte del socio Claudio Rojas López, quien ingresó a Spence en 2005, era un muy buen compañero y amigo y fue parte importante de la empresa y de la fundación de la organización sindical.
Claudio se despidió de su familia días antes para subir a faena y comenzar su turno. En faena, por enfermedad COVID 19, fue trasladado a una residencia sanitaria. Se agravó. Fue internado en una clínica y el 15 de abril, falleció.
Así de rápido y triste fue el proceso de este socio tan querido por sus colegas y amado por su familia. Familia quien recibió escasa información y apoyo por parte de la Compañía Minera Spence S.A., quienes, según los testimonios de los dirigentes sindicales, no tomaron este fallecimiento con la importancia que requería y trataron el caso con mucha falta de humanidad.
Ante ello, con fecha 11 de octubre de 2022 se interpuso ante el Juzgado de Letras del Trabajo de Antofagasta una demanda de indemnización de perjuicios en contra de Cía. Minera Spence S.A., a cargo del abogado Juan Álvaro Salas Santander, Asesor del Sindicato.
La razón es porque Claudio Rojas padeció una enfermedad con resultado de muerte, contingencia que fue calificada como de origen laboral por la Superintendencia de Seguridad Social en septiembre de 2021.
En palabras del abogado Salas, “la demanda se funda en que el Señor Rojas López, con fecha 10 de marzo de 2021, se contagió de Covid-19 debido a que debía realizar sus labores en la empresa de forma presencial”.
La demanda interpuesta relata la forma en que el trabajador habría contraído la enfermedad, además de señalar la secuencia de actos que conllevaron a su lamentable fallecimiento.
Obviamente, el fallecimiento de Claudio ha significado para su familia una tragedia irreparable en lo emocional, incluida la privación de la presencia del sostén económico del grupo familiar.
Desde el Sindicato, su presidenta, Joanna Marín, afirma que “como sindicato siempre estuvimos presentes. Desde que nos enteramos que Claudio se contagió y bajó a la Residencia y luego su hospitalización. Siempre estuvimos en contacto con su familia”. Ellos como familia estuvieron muy agradecidos por este gesto.
Marín contó que hicieron una misa virtual gracias a la ayuda de un colega de Sierra Gorda quien consiguió al pastor, se invitó a todos los colegas, a su familia, a sus padres y a todos sus amigos y conocidos, teniendo un momento muy especial en el cual pudieron honrar su memoria.
Respecto al objetivo de esta demanda, afirman que “Como sindicato, lo que queremos con esta demanda es darle justicia a la familia y que esto no vuelva a ocurrir. La empresa por ley tiene que asegurar la salud y seguridad de todos sus trabajadores. En este caso la parte legal fue de la ACHS, quienes indicaron que era un caso no laboral. Nosotros no estuvimos de acuerdo y apelamos a la SUCESO, quienes ratificaron que era laboral. Con ello, conversamos con la familia y decidimos presentar esta demanda”, complementa la presidenta.
Joanna asegura que “fue un proceso muy fuerte, con harta pena, con harta tristeza vivirlo. Pero estuvimos con la familia y vivimos esta pérdida con ellos. Además, una de las cosas más terribles fue la frialdad por el protocolo Covid: prácticamente no hubo velorio y en el cementerio pudimos ingresar muy pocas personas”.
“Claudio posteriormente fue llevado a su ciudad en Serena con su familia, pero no nos hemos olvidado de él, seguimos el apoyo nosotros con proyectos sociales. Hemos tenido el apoyo también hacia el Rotary en Peñuelas en Coquimbo, donde él siempre participaba. El año pasado hicimos unos aportes en nombre de él y queremos ver cómo mantenemos su legado. Es un proceso en el que aún estamos”, finaliza Joanna.
El actual secretario del Sindicato, Juan Ovalle, en ese tiempo no era dirigente y vivió el proceso como colega. Relata que fue todo muy confuso y que la empresa no estuvo a la altura de un hecho tan terrible e impactante para todos.
“Claudio era un colega muy cercano a las personas, le gustaba conversar, si no te conocía igual llegaba a tí, conversaba contigo, entablaba una conversación grata, es uno de los recuerdos que tengo de él, además de ser socio del sindicato fue un aporte grande para la fundación del sindicato y también para que la organización sindical fuera creciendo”, comienza Ovalle.
“Con respecto a su fallecimiento, para nosotros como amigos, compañeros y como socios del sindicato fue un tema muy mal abordado por la Empresa. Si bien es cierto, la Empresa sí tomó algunos resguardos, lógicamente no fueron los suficientes. No teníamos mayor información de lo que estaba pasando, de hecho, la empresa nunca, hasta el día de hoy, lo ha considerado como un evento de fatalidad, nunca lo ha considerado así. Cuando terminó el año fiscal ellos no lo quisieron reportar tampoco en sus números”, agregó.
“La principal razón de esta demanda es que Spence no tomó los resguardos, el trato informativo sobre el caso no fue honesto, no fue empático. Por eso, su familia tiene todo el derecho a demandar por el proceso vivido”, asegura Juan.
Por ahora, el proceso continúa y el sindicato espera que se haga justicia para esta familia y para este socio que se recuerda cada día con alegría y por su gran compañerismo.
La audiencia preparatoria está fijada para fines de enero de 2023 y se espera que días antes de la audiencia, la empresa efectúe sus respectivos descargos al contestar la demanda.