El Departamento de Defensa de EE. UU., a través de su división DARPA, busca mejorar la transparencia en la estimación de precios de minerales críticos mediante un programa basado en inteligencia artificial (IA). Este esfuerzo, denominado «Open Price Exploration for National Security» (OPEN), tiene como objetivo abordar la opacidad en las transacciones de commodities. Exploramos cómo esta iniciativa podría transformar el mercado y enfrentar los desafíos existentes.
El mercado de metales, tradicionalmente influenciado por mercados de futuros y agencias de fijación de precios, podría enfrentar desafíos con una evaluación oficial de precios por parte del Gobierno. Existe la preocupación de que estructuras enfrentadas para determinar precios generen confusión. El programa OPEN busca abordar esta preocupación y aumentar la transparencia en las transacciones.
DARPA y el Servicio Geológico de EE. UU. planean colaborar con contratistas privados para desarrollar un modelo de IA respaldado por datos como ubicación, momento de producción y costos. El objetivo es proporcionar transparencia en precios para agencias gubernamentales y entidades comerciales, reduciendo riesgos percibidos en los mercados de futuros y agencias de fijación de precios.
Fases del Modelo IAEl programa OPEN implementará su modelo de IA en tres fases a lo largo de dos años. Este modelo se centrará en prever cómo eventos inesperados, como huelgas laborales, podrían afectar la oferta, excluyendo pronósticos de desastres naturales o eventos específicos del mercado.
La capacidad del programa OPEN para anticipar fluctuaciones de precios podría permitir al Pentágono sincronizar compras estratégicas para reservas nacionales. Un ejemplo concreto es el plan de adquirir 1,300 toneladas métricas de lantano este año, un componente crucial en aleaciones de acero, que no se negocia en mercados de futuros.
Aunque el Pentágono afirma que no busca reemplazar mercados existentes, se destaca el problema de precios del níquel en 2022 en el London Metal Exchange como ejemplo de dinámicas internas y prácticas anticompetitivas que podrían afectar la obtención de datos precisos.
La reacción de empresas mineras, clientes y bolsas de metales frente a una estimación de precios del gobierno de EE. UU. sigue siendo incierta. La mayoría de los metales se venden mediante contratos a largo plazo, y las tasas en mercados como el LME están influenciadas por factores como transporte, seguros e impuestos de importación.